El flagelado ex dirigente indígena, Marcial Fabricano, está fuera de peligro aunque tardará unos 60 días en recuperarse físicamente del castigo corporal que le dieron el fin de semana, informó su esposa Ruth Ortega, desde Santa Cruz.
Fabricano fue llevado, ayer, hasta la capital cruceña porque su salud se complicó luego de varios días de que recibiera más de 30 chicotazos en la espalda en el Territorio Indígena Parque Nacional Isidoro Sécure (TIPNIS), en el sector sur del departamento.
Ortega de Fabricano informó que en la víspera le practicaron varios exámenes con los que los médicos descartaron lesión cerebral, una de las preocupaciones principales.
Tendrán que pasar 60 días para que el castigado, de 55 años de edad, recupere totalmente su salud.
La esposa pidió a la población trinitaria que participe en la marcha de este viernes convocada para protestar por el flagelo. A Fabricano lo acusaron de traicionar al movimiento indígena y por eso lo azotaron.
La marcha es convocada por el Comité Cívico del Beni, institución que repudió el acto y pide que cesen las violaciones a los derechos humanos, supuestamente impulsadas por el Gobierno.
En el otro extremo aparece, Ernesto Noe, compañero de Fabricano en la histórica marcha por la tierra, el territorio y la dignidad en la década del 90.
Según Noe, Fabricano autorizó, cuando era dirigente indígena, un castigo similar en contra de Cástulo Semo.
Mientras tanto, la Iglesia católica en el Beni pidió que se erradiquen de la cultura indígena los castigos físicos.
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