Los trabajadores en salud así como del magisterio urbano y rural del Beni decidieron mantener el paro de actividades, suspender las movilizaciones callejeras y acatar la vigilia hasta el miércoles.
Los trabajadores iniciaron la tercer semana de presión para que el Gobierno Nacional incremente la renta de jubilación, pedido que es coordinado con otros sectores laborales del país.
Los movilizados tenían planeado radicalizar la presión desde este lunes con una marcha “contundente” que derivaría con el bloqueo de la carretera entre Trinidad y Santa Cruz; sin embargo recibieron un instructivo de su ente matriz.
El pedido de los dirigentes es que se mantenga la huelga general indefinida y la vigilia, se suspendan las marchas y bloqueos por 48 horas, mientras se reinicia el diálogo entre los representantes laborales y funcionarios del Gobierno.
La secretaria Ejecutiva de los Trabajadores en Salud, Shirley Molina, lamentó que los sectores sociales hayan anunciado la realización de marchas en defensa del proceso de cambio.
“Esta contramarcha es promovida por el Gobierno. En vez de preocuparse de enfrentarnos entre pobladores, porque somos de este mismo pueblo y somos población también nosotros, debería preocuparse de dar solución” a los pedidos, sostuvo.
La contramarcha se realizó en horas de la tarde.
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