La desaparecida Ana María Romero de Campero alentó la cobertura periodística a la marcha indígena de 1990, recordó el periodista Juan Carlos Zambrana.
Romero, o Anamar como también era nombrada, era directora del periódico paceño y Zambrana su corresponsal en el Beni, cuando les tocó “enfrentar el momento de la Marcha Indígena por el Territorio y la Dignidad”.
“Ella, anticipadamente, me dijo: prepárese porque hay que hacer esa cobertura, dándole la importancia que ya le estaba dando ella como directora, Presencia como medio de comunicación, y el país como sistema nacional a un asunto que empezaba a tener importancia propia”, recordó.
Zambrana confesó que en ese tiempo él dudaba de que la marcha se vaya a realizar. Al final, la marcha fue histórica y el matutino fue uno de los pocos medios de comunicación que informó constantemente sobre la caminata de los indígenas desde Trinidad hasta la ciudad de La Paz.
El aliento a la cobertura mostró a Romero en una dimensión “entre periodística y humana”.
“Periodista, que estaba muy lejos, allá en La Paz en las alturas, pero que veía con visión propia, con conocimiento, con intuición propia lo que debíamos hacer ya como personas hacia un grupo, un sector social olvidado”, añadió.
Los dos periodistas se volvieron a encontrar en otro escenario, años después. Cuando Romero asumió como primera Defensora del Pueblo de Bolivia invitó al beniano a ser su Jefe de Gabinete.
“Ahí conocí a una Ana María Romero defensora de los derechos humanos y defensora del pobre, del desposeído”, contó.
El periodista lamentó la muerte de “la mujer periodista, defensora de los derechos humanos y promotora de la formación periodística, de nuevas generaciones, de mejorar nuestra calidad de trabajo”.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario