En los tres primeros días de julio, la Unidad de Bomberos Voluntarios de Trinidad atendió a cinco incendios de pastizales en los alrededores de la ciudad, mientras que en el mes de junio el total de este tipo de emergencias atendidas fue de 28.
Las cifras las proporcionó Camilo Meneses, comandante del cuerpo local de bomberos, quien alertó sobre el peligro que conlleva este tipo de fuego que se origina en zonas baldías pero que puede llegar hasta domicilios particulares.
Vecinos de Villa Moisés, sector nor-este de Trinidad, llamaron, este domingo, a los bomberos alarmados por el fuego en el monte cercano.
Al llamado acudieron siete bomberos voluntarios y cuatro bomberos de la Policía, en sus respectivos carros.
El siniestro fue controlado después de que se consumieron en las llamas unas cuatro hectáreas de vegetación.
El día anterior fue el más ajetreado del mes que comienza. Acudieron al primer llamado alrededor de las 11 de la mañana en la zona Nueva Trinidad. Durante hora y media, los voluntarios junto a los bomberos de la policía lucharon para apagar las llamas. Cuando lo lograron, tres hectáreas de pastizales habían desaparecido por el fuego.
Poco después, a la una de la tarde, fueron llamados detrás del surtidor de combustible que está en las afueras de la ciudad, carretera a Santa Cruz.
La zona está siendo urbanizada. De alguna manera el fuego comenzó en la zona baldía pero existía el peligro de que las llamas se acerquen a las bombas de combustible.
Policías y voluntarios nuevamente se enfrentaron al calor de las llamas en un día soleado, pero de baja temperatura. Se calcula que 10 hectáreas de pastizales se quemaron, pero el fuego no alcanzó a causar daños materiales en el surtidor.
El tercer llamado del sábado lo recibieron desde la zona de La Niña Autónoma. El fuego fue controlado antes de que se acerque a las casas, pero otras cuatro hectáreas de pastizales ardieron.
El comandante Meneses dijo que el trabajo entre las unidades de bomberos- los voluntarios y de la policía- es coordinado, cuando se encuentran en una misma zona de operaciones.
El voluntario señaló que por el momento cuentan con el equipo adecuado para trabajar, cuando el número de incendios comienza a subir por el viento que llega desde el sur y por la vegetación seca que rodea a la ciudad.
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