El juez Alejandro Yuja Rodríguez ordenó arresto domiciliario contra Rocío Ferrier, supuesta implicada en el caso de intento de soborno a dos asambleístas benianos, en una audiencia que duró alrededor de 17 horas.
La audiencia se inició la tarde de este miércoles y se extendió hasta las primeras horas de la mañana del día siguiente.
El abogado defensor, Guido Melgar, informó que el juez también emitió una orden de arraigo por lo que Ferrier no podrá salir del país, y dispuso que pague una fianza de 150 mil Bolivianos.
El dinero tendrá que ser depositado en un plazo máximo de 30 días.
“El tema de la detención domiciliaria, para nosotros, es una alegría a medias. Nuestro principal objetivo era evitar la detención preventiva”, dijo.
El juez determinó que existe peligro de obstaculización en la investigación del caso porque, supuestamente, Ferrier amenazó a la fiscal Silvana Rojas. La autoridad judicial consideró que para evitar ese riesgo bastarían las tres medidas cautelares.
También, Yuja consideró que existen elementos suficientes para sostener que Ferrier “es probablemente autora de los delitos de organización criminal, receptación y asociación delictuosa”. Otro cargo en su contra es el de legitimación de ganancias.
Sobre los cargos, el abogado aseguró que en ningún momento se demostró que Ferrier posee bienes inmuebles productos de actos de corrupción de algún funcionario público, ni tampoco se presentaron pruebas contundentes para demostrar las otras acusaciones.
Melgar anunció que presentarán en los próximos días un recurso de apelación incidental.
Ferrier fue aprendida al anochecer del lunes. El juez determinó que esa aprehensión fue ilegal, a pesar de que haya estado dentro del horario permitido por ley.
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