Las autoridades de la Prefectura del Beni esperan conocer la situación económica de la Compañía de Servicios Eléctricos de Trinidad (COSERELEC), antes de pronunciarse sobre el supuesto alejamiento obligado del negocio de la electricidad.
El secretario departamental jurídico de la Prefectura, Rafael Saavedra, aseguró que en reiteradas oportunidades solicitaron, de manera oficial, esa información a la anterior administración, sin embargo, nunca les fue entregada.
“Todos tenemos conocimiento de manera informal de todo lo que COSERELEC adeuda a ENDE, sin embargo, como mayores accionistas que somos nosotros los de la prefectura todavía no tenemos de manera oficial los estados económicos y financieros de la cooperativa como para poder nosotros presentar una posición respecto al tema”, explicó.
Saavedra indicó que asistirán a la junta general extraordinaria de accionistas convocada por el interventor, Bergman Cuellar, para el 31 de mayo.
“No dudamos de que tengamos una deuda pero queremos tener conocimiento de la deuda”, dijo.
Aclaró que tampoco tienen conocimiento oficial de la resolución de la ex-superintendencia del sector que da el golpe final a COSERELEC.
Observó que la junta se realice en un día declarado como feriado por la celebración del aniversario de fundación de la ciudad.
Adelantó que con la información oficial que reciban de parte del interventor estudiarán las posibilidades legales que tienen para “intervenir en el tema”.
El interventor administrativo de COSERELEC informó por diferentes medios de comunicación que la compañía tiene una deuda de 36 millones de Bolivianos con la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE).
Además tiene otras deudas con otras entidades. La deuda total estimada sobrepasa los 50 millones de Bolivianos, más de dos veces su patrimonio, calculó Cuellar.
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