Los hospitales municipales de Trinidad esperan que el Servicio Departamental de Salud (SEDES-Beni) revierta la decisión de reducir el personal que contrató para atender a los enfermos este año.
El SEDES-Beni anunció la suspensión de los contratos del personal médico destinado a diferentes centros de salud del departamento por falta de recursos económicos.
El director del Hospital Materno Infantil, Eduardo Alí, informó que 60 funcionarios fueron afectados con la medida en la maternidad local entre personal médico, paramédico y de limpieza.
Además, habían siete en lista de espera para ser contratados.
Según Alí, la mayoría de estos funcionarios continúa asistiendo a sus fuentes de trabajo “esperanzados” en que la Gobernación del Beni encuentre una solución a la falta de dinero.
El Director había alertado sobre las dificultades que enfrentaría la maternidad si ese número de funcionarios dejaba de trabajar como instruyó el SEDES.
Ante el inconveniente, la dirección del nosocomio realiza un estudio para determinar cuál es la cantidad mínima de funcionarios que pueden dejar de asistir al centro hospitalario.
“Aproximadamente 53 ó 54 funcionarios, yo pienso que esa es la cantidad mínima que nosotros estaríamos en condiciones de asumir para que ninguna de las actividades de la maternidad pueda alterar sus funcionamiento”, sostuvo.
Alí reconoció que la cantidad del personal contratado por la Gobernación y el Municipio es muy significativo para el normal desenvolvimiento del materno infantil.
En el hospital Presidente Germán Busch la situación es igual de complicada, 31 funcionarios fueron afectados.
De manera extraoficial se conoce que la Gobernación se comprometió a buscar recursos para cancelar los sueldos que adeuda a los funcionarios y renovar los contratos a algunos de ellos.
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