El día de Navidad fue una jornada en la que se manifestó la solidaridad entre vecinos y en la que miles de niños y niñas trinitarias fueron agasajados por diferentes instituciones.
La Juventud Mariana Vicentina (JMV) de la parroquia San Francisco de Asís entregó 36 canastones armados con ropa y alimentos a personas de escasos recursos. Los productos fueron recolectados por los jóvenes en la campaña navideña que realizaron semanas atrás, informó el dirigente del grupo, Jaime Luna.
El grupo juvenil de dicha parroquia, ubicada en la zona Cipriano Barace, decidió entregar los canastones a familias del mismo barrio, y a otras de Nueva Trinidad y Pedro Ignacio Muiba.
Los jóvenes no se limitaron a cumplir con esa meta, sino que también brindaron una chocolatada a más de un centenar de niños y niñas que llegaron a la Iglesia la tarde de Navidad.
Los niños jugaron, cantaron, se divirtieron frente al pesebre armado dentro del templo, donde se realiza esta actividad desde hace una década.
Horas antes, las sonrisas se contaban por decenas en un domicilio del Barrio Los Tocos, donde la agrupación ciudadana Cambio Beni ofreció un desayuno navideño a niños y niñas de diferentes barrios de la ciudad. Luego del desayuno llegaron los regalos.
Casi a la misma hora, una larga fila se formó en la plaza Principal “José Ballivián” detrás de una movilidad de la Pil-Beni, empresa que junto al Ejecutivo Municipal de Trinidad, distribuyó 20 mil bolsitas con productos lácteos.
La leche es para que los niños disfruten una “saludable Navidad”, afirmó el gerente de la Pil, Hernán Franco.
José Luis Maesse, funcionario municipal, explicó que los productos lácteos fueron repartidos de manera gratuita en la plaza central, en el barrio Niña Autónoma y Villa Moisés, estas dos últimas zonas son habitadas por personas damnificadas por las inundaciones de años pasados.
Con todo, el viernes fue una jornada en la que los niños lucieron sus mejores galas, mostraron los juguetes recibidos, disfrutaron el desayuno navideño pero ante todo se reforzaron los lazos familiares con el nacimiento del Niño Dios.
Juventud Mariana Vicentina entregó canastones en los barrios más pobres.
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